Monchis: original, sofisticado y seductor. Un novedoso concepto que derrocha sabor y saber hacer
Ana S. Diéguez
El imparable chef autodidacta Julián Mármol vive en constante evolución. Ambicioso. Emprendedor. Perfeccionista. No sabemos de donde saca el tiempo para embarcarse en nuevos proyectos, aunque lo que está claro es que Julián exprime los días al máximo. Mármol no se conforma con haber recibido la ansiada estrella Michelin en Yugo The Búnker y continúa depositando todas sus energías en su proyección profesional. El verano pasado abría Godai en Menorca y hace unos meses estrenaba dos nuevos espacios en el Food Hall de Galería Canalejas: Monchis y The Eight. Al hablar con él unos minutos tenemos claro que aún nos sorprenderá con muchas novedades porque disfruta con su trabajo y vive en constante evolución.
En esta ocasión nos desplazamos a Galería Canalejas para conocer Monchis. Un impresionante espacio decorado por la conocida interiorista Lourdes Treviño Quirós. Madera y terciopelo comparten protagonismo con coloridas buganvillas y un sistema vanguardista de luces y sonido que nos adentra en el seductor universo de Monchis. Elegancia, sofisticación y exotismo. Un precioso local que cuenta además con un formidable reservado con acceso directo desde el parking y baño privado para garantizar a sus clientes una privacidad total y absoluta.
Otra de las novedades de Monchis son sus maravillosas sillas Katrinas donde sirven de manera exclusiva su menú Omakase. Una propuesta que, como su propio nombre indica, nos pone en manos del chef para que podamos disfrutar de un menú dinámico que solo se sirve una vez por servicio.
En la propuesta de Monchis, la coctelería cobra un protagonismo indiscutible y resulta muy recomendable maridar los originales platos de Monchis con su coctelería de autor que contribuye a potenciar los aromas, sabores y matices de sus exquisitas elaboraciones.
Nosotros probamos el coctel Tokyo D.F. Un divertido trago que fusiona Japón y México. Elaborado con tequila, lichi, licor de chile chipotle, cítricos, agave, soda de toronja y shichimi, nos pareció la mejor forma de arrancar nuestra aventura gastronómica en Monchis.
Para acompañar el delicioso coctel pedimos la vieira de Hokkaido con Kizami Wasabi, una verdadera delicia que nos condujo a una formidable gamba blanca con ají mexicano, bergamota y aceite de su propio coral. Seguimos con una magnífica ostra Sorlut en tempura con salsa taquera de mejillones.
Una curiosa elaboración que nos enamoró de inmediato, y que dio paso a una sabrosísima kokotxa de merluza, rebozada en yema de huevo curada en chile y salsa de callos con gamba blanca. Original y con un acertado toque picante compartió protagonismo con un divertido dim sum de papada de ibérica de bellota que merece la pena probar cuando se visita Monchis. Súper recomendable.
El siguiente plato, un curioso taco de wagyu con esencia de tuétano y sal de gusano que comimos con las manos embriagándonos plenamente con su exquisito juego de sabores y matices. +
Monchis, un inolvidable viaje sensorial. Una original fusión japo mexicana que rebosa sabor y derrocha saber hacer. Uno de los últimos proyectos del incombustible Julián Mármol que vuelve a sorprendernos una vez más… ¡Tenemos claro que este increíble chef autodidacta aún va a dar mucho que hablar!
Monchis
Dirección: Pl. de Canalejas 1, 28014 Madrid
Teléfono: 91 637 95 74
Web: https://www.monchisrestaurante.com/
Precio Medio: 65€
Menú Omakase: 90€ (bebida no incluida)