Yamamay, a través de la nueva campaña de verano de 2020, trata de poner una vez más en primer plano la relación entre el hombre y la naturaleza: de hecho, todo está interconectado, cada ser vivo está vinculado al otro, cada acción, cada elección que hacemos tiene efectos que se propagan en el individuo y en la comunidad, somos un todo en el que cada uno está íntimamente ligado al otro.
La naturaleza debe ser respetada y protegida, porque de ella se deriva el equilibrio de la vida, nunca antes esto había sido tan evidente para todos. Los Ángeles, frenética metrópoli donde los panoramas urbanos hechos de hormigón y rascacielos se alternan con sensacionales paisajes naturales, es el telón de fondo de las fotografías de la campaña realizada por la fotógrafa estadounidense Josephine Clough, para subrayar, una vez más, el importante papel que la naturaleza puede desempeñar en la configuración de nuestras ciudades del futuro para que sean habitables y prósperas. La moda se convierte así, una vez más, en el vehículo para centrar la atención en uno de los temas más preocupantes del mundo en este momento.
Rodeada de una exuberante vegetación, iluminada por una luz cálida y envolvente, una moderna Madre Naturaleza, interpretada por la súper modelo italiana Bianca Balti, ya testigo de la campaña de Yamamay «Basically Sexy» y «Say Sexy» para la primavera de 2020, nos comunica, con la frescura que la distingue, energía y vitalidad, un estímulo para mirar con optimismo hacia el futuro, hacia nuevas posibilidades y horizontes.
Esta campaña, rodada en Los Ángeles, debería haber sido sólo la segunda etapa del viaje de verano de Yamamay, que comenzó con un rodaje en Nápoles, bañado por las aguas de nuestro precioso Mar Mediterráneo, en grave peligro debido a la contaminación, para luego continuar a otros lugares recientemente afectados por la furia de la naturaleza como Australia, donde los incendios han quemado bosques y destruido especies animales, para luego continuar en el Océano Índico, una zona fuertemente afectada por el cambio climático y la contaminación. Lamentablemente, el proyecto se ha interrumpido debido a los recientes acontecimientos relacionados con la emergencia sanitaria.
“Este período ha hecho que la naturaleza ha vuelto a «respirar» sin tener miedo. Lo demuestran todos los animales que han visitado las ciudades: liebres en los parques, patos en el centro de la ciudad, jabalíes caminando en las afueras de Roma. Por lo tanto, hemos elegido una narración que podría contar tanto la naturaleza como la intimidad: una casa con vistas a la ciudad pero impregnada de verdor, un verde que habla y respira. Para no olvidar y afrontar el futuro de otra manera: con respeto hacia el planeta pero también hacia nosotros mismos que tendremos que seguir estando atentos y cuidando del ser humano». Gianluigi Cimmino, CEO de Pianoforte Holding.
Después de posar para la campaña de ropa interior de Basic y Primavera 2020, Yamamay me propuso participar también en la campaña de ropa de playa, y por supuesto acepté tanto porque la primera experiencia juntos había sido muy positiva como porque me siento muy cerca del tema que la empresa ha decidido tratar para esta nueva campaña: la relación entre el hombre y la naturaleza, nunca antes vista por todos. Amo la naturaleza y creo que debe ser respetada y protegida, porque de ella se deriva el equilibrio de la vida y nuestro futuro… y también me gusta que Yamamay sea una marca que se esfuerza por cambiar las cosas, a partir de colecciones hechas con materiales sostenibles. La moda tiene un gran poder porque llega a millones de personas y es justo que también trate temas importantes como el medio ambiente y que apoye la investigación científica.
– Bianca Balti
El compromiso de Yamamay con el medio ambiente es constante, este proyecto forma parte de un proyecto más amplio iniciado hace 3 años en colaboración con la Fundación One Ocean: Yamamamay y el Grupo Pianoforte han firmado, de hecho, la Charta Esmeralda, un código ético para la protección del mar, con el que se comprometen a poner en práctica sus principios y a sensibilizar, con acciones concretas, a sus consumidores, invitándoles a vivir el medio ambiente y el mar de forma sostenible. El Gruppo Pianoforte, al que pertenece Yamamay, también apoya a la fundación con una importante contribución económica anual.
Además, también inició una trayectoria en sostenibilidad dentro de sus colecciones hace 3 años añadiendo, temporada tras temporada, prendas hechas con materiales procedentes de la naturaleza y con procesos de producción que tienen menos impacto en el medio ambiente. Algodón orgánico, telas biodegradables, telas naturales creadas con hojas de eucalipto, telas hechas con plástico reciclado, telas sensibles. Esta evolución sostenible dentro de las colecciones está diseñada para fomentar un consumo más consciente y una producción más ecológica.