Aquazzura presenta su colección inaugural de gafas, un nuevo y luminoso capítulo en el legado de sofisticación y artesanía italiana atemporal de la casa. Un debut comisariado que reimagina las gafas de sol como objetos de arte, infundiendo a cada par la elegancia vibrante, la atención artesanal y el espíritu de evasión en el corazón de la marca.
Para ofrecer un producto especial, distintivo y único que refleje plenamente los códigos, valores y estética de la marca, Aquazzura se ha asociado con especialistas en gafas de alta gama que cuentan con una arraigada experiencia en el sector. Cada par de gafas de sol se fabrica a mano en una boutique de Italia. La colección se basa en tres estilos distintos, cada uno de ellos un radiante tributo a la individualidad femenina.
Las monturas Palm Beach ofrecen un poético homenaje al glamour retro y al encanto bañado por el sol del verano italiano. Sin montura y artísticamente perfiladas con contornos florales alargados, evocan las lámparas de cristal y las botellas sopladas a mano de los años cincuenta y sesenta.
Fabricadas en nailon translúcido y acetato, sus patillas metálicas texturizadas evocan las hojas de palmeras tropicales, mientras que los tonos inspirados en la puesta de sol brillan con una elegancia atemporal.
La atrevida silueta Bella transforma el glamour de los años setenta en una declaración de estilo moderna: formas de aviador de gran tamaño, inspiradas en los años setenta, en acetato mate o translúcido en negro, gris claro y miel.
Acentuada con lentes degradadas o en contraste, Bella se distingue además por un núcleo metálico texturizado encajado en las patillas y un llamativo motivo de cocodrilo con efecto 3D que recorre el borde superior y el puente, evocando el dominio experto de Aquazzura de diversos materiales.
Con Riviera, el clásico ojo de gato se esculpe de nuevo. Este estilo de contorno suave y perfil más pequeño pero más ancho se inspira en la herencia luminiscente del cristal de Murano, canalizando una modernidad lúdica a través de acetatos bicolores transparentes y lechosos en rosa, caramelo, negro y blanco. Los intrincados detalles metálicos incrustados en las patillas aportan un toque vanguardista y una dimensión añadida.
Los tres estilos están unidos por un sello central: un alambre bellamente forjado en forma de palma, con una delicada punta en la parte superior, encerrado dentro de los brazos de acetato, un detalle sutil e icónico que hace que cada par sea inconfundiblemente Aquazzura. Reflejando el mismo arte, el envoltorio eleva la experiencia: un estuche metálico suave inspirado en un clutch dentro de la característica caja azul aguamarina.
«Las gafas parecen una extensión natural para Aquazzura, ya que siempre hemos sido una marca profundamente conectada con el mar y los destinos soleados. Descubrí una fábrica boutique excepcional en la región del Véneto que elabora a mano cada par con detalles intrincados, haciendo que las gafas de sol sean sofisticadas, modernas y hermosas.»
Edgardo Osorio